El concierto era en la sala Jimmy Jazz, antigua Azkena, y como siempre dimos unas cuantas vueltas en coche antes de encontrar la zona.
Curiosa entrada, 4 € menores de 30 y 8 € el resto. Muy listos, porque las entradas eran iguales y al de la taquilla le daba igual cual darte, ni te miraba las canas! Nosotros pagamos gustosos la tarifa legal, una de niña y dos de hombre. Sobretodo porque antes de pedirlas, no sabíamos si eran diferentes, jeje Pero vaoms, que un conciertazo así bien valen los 8 eurines, y más vistos los precios que andan últimamente por ahí.
El concierto estaba subvencionao por el ayunta, para la gente jóven, así que no servían alcohol en la barra. Con lo que los grupos ya podían tocar bien, que la gente estaba atenta. Las cervezas "sin" (de 1%) a 2 euros en una sala de conciertos está muy bien, así la chavalería va más olgada para pillar las drogas.
Los Willis Drummond son muy buenos y su autoeditado "Anthology" es un discazo, pero ayer presentaban nuevo disco y los temas nuevos tenían un aire a RRV (rockradikalvasco) que asustaba, la verdad... tampoco hay que exagerar, pero tenían un toque sí. El concierto estubo bien, pero abusaron de temas lentos, tenían que haber acelerao un poco.
Luego salieron Standstill. Guitarra, bajo, bateria, cantante+acustica, dj+samplers y teclado+guitarra. La cosa fué tremenda.
Tienen un sonido cojonudo, muy potente incluso con la costilla rota que traía el batería Ricky. Yo flipé mucho porque con los directos han ido mutando los temas y ahora son otra cosa.
Creo que debían editar un directo en DVD cuanto antes. Es lo que se echa en falta en el "10 años y una zanahoria". Ese DVD lo tenían que haber bordao con un buen directo. ASí que habrá que esperar a que se decidan a sacar un directo de verdad.
Ala, hasta la próxima!
